Casco Viejo de Bilbao
Casco Viejo Bilbao BI
Cuando se fundó la Villa de Bilbao hace más de 700 años, sus habitantes vivían del regadío y la pesca, y la Ría empezaba ya a conformarse como la mejor vía de comunicación con el exterior.
Había en aquel entonces dos núcleos de población de distinto carácter: por un lado, la margen izquierda o Bilbao la Vieja, que era una zona minera donde se trabajaba el hierro en las ferrerías. Y por otro, la población de la margen derecha, llamada Casco Viejo, dedicada al tráfico mercantil y portuario.
El corazón de ese Casco Viejo estaba rodeado de murallas y formado por tres calles paralelas. Tiempo después se hizo necesario derribar las murallas y trazar cuatro calles más perpendiculares a la Ría que, junto con las tres primeras, componen lo que hoy se conoce como las Siete Calles.
Desde el año 1979, esta zona es peatonal, convirtiéndose en un figurado centro comercial de 240.000 metros cuadrados, con cientos de establecimientos comerciales, bares y restaurantes.
En el recuerdo, la mayor catástrofe que ha sufrido la ciudad de Bilbao, las inundaciones de 1983, que asolaron el casco histórico hasta destruirlo por completo. Pese a la devastación, el Casco Viejo logró resurgir y convertirse en una de las zonas más turísticas y comerciales de la ciudad.